martes, 27 de febrero de 2007

Nicolás Vázquez, un actor que cree en Ibope

Graba Casi ángeles en Buenos Aires y hace teatro en Mar del Plata, de modo que está viviendo a puro vértigo. Jura que con Emilia Attías el vínculo es fantástico y confía en que será el éxito de Telefe. Su esposa, Mercedes Funes, comenta, lo acompaña y lo banca.

Apenas tiene tiempo. Mientras almuerza, atiende a Perfil, juega con el fotógrafo que lo retrata, saluda a las chicas que se le acercan, se saca fotos, firma autógrafos, mira la hora, organiza su salida a Mar del Plata y piensa en su futuro. Así es Nicolás Vázquez. Su carisma y movimiento lo llevaron a ganarse un lugar dentro de la pantalla chica. Ya no es el joven que prometía en Verano del 98 o el simpático representante de jugadores en el éxito de Son amores. Próximo a debutar con Casi ángeles , la nueva tira de Cris Morena, que protagonizará junto a Emilia Attías por la pantalla de Telefe y que se estrenará en marzo, Vázquez se mostró feliz con su presente, donde además conduce Mutando , una obra de teatro desde la cual critica la actual televisión y que además es revelación en las tablas de Mar de Plata. Amor, trabajo y raiting según Nico Vázquez.

—¿Te queda tiempo para vivir?
—(Risas). Empezó el rally. Voy de un lado a otro, pero muy contento, porque en esta carrera no pasa muchas veces el tener la posibilidad de hacer teatro y televisión al mismo tiempo. Estoy contento con Mutando y también con Casi ángeles. Es muy sacrificado pero vale la pena, el resultado es buenísimo. Laburar para Cris (Cris Morena), y que esté pasando lo que ocurre con Mutando , que desde que empezamos es espectacular, a sala llena, es muy bueno. Empezó a la gorra y ahora es casi un sueño lo que pasa con ese espectáculo.

—Se comentó que el contrato que firmaste para Casi ángeles fue uno de los mejores de los últimos tiempos de la televisión argentina...
—No sé. Cada vez que laburo trato de no pensar en lo que firmé. Muchas veces se hablan cosas que no son ciertas. Obviamente que gano más que cualquier amigo mío.

—¿Cómo va tu relación con Emilia?
—Espectacular. Ya llevamos tres meses juntos y no digo tres meses de grabación, sino tres meses de ensayos, de la grabación del disco, de bailar y trabajar para entrar en ritmo con los personajes. Ya te diría que tenemos una amistad, hay mucha química y eso se va a notar en la pantalla y en el producto final.

— Hablemos de Mutando. ¿Cómo te trata el ser crítico de tus colegas?
—No soy crítico de ningún colega. Lo que yo hago es mostrar desde los personajes una visión de cómo se ve la televisión. No es Nicolás, son los personajes, y en ningún momento doy nombre y apellido de alguien. Yo me refiero a la televisión, te diría que ni siquiera la argentina, sino mundial. Esa televisión en la que si hoy servís, estás y permanecés. Es un poco hacer esa parodia y autocrítica. Me parece importante, como figura de la televisión y laburando en este medio, poder hacer una autocrítica y divertirme. Pero en ningún caso es que le doy a tal o cual porque es un hijo de puta o algo así, lo hago porque me divierto. Si en algún momento nombro a algunas de las personas, es porque pertenecen y son figuras importantes del espectáculo, sería erróneo de mi parte no nombrarlas. Pero en ningún momento me refiero con mala intención a nadie.

— ¿Has hablado con alguno de tus colegas sobre la obra?
—Sí. De hecho, toda la gente que trabaja en la televisión me agradece la crítica que hago. Lo que pasa con el público es extraordinario, como por ejemplo con un personaje que es discapacitado y quiere trabajar en televisión y lo consigue. Es un poco eso; hoy por hoy, en la televisión hay lugar para todo el mundo y es un poco eso la crítica.

—En esa crítica es lógico hablar del rating. ¿Cómo te llevás con el minuto a minuto?
—Lo respeto y creo en el rating. Cualquier cosa por el rating no voy hacer, pero que me interesa, sí, me interesa, si no sería un hipócrita. Es lo que hoy lamentablemente te hace permanecer. Creo en Ibope, creo que lo marca Ibope es lo que marca la calle y el pueblo. Me pasó siempre y en todos los programas que hice.

—Volvió Gran hermano ... ¿Cómo lo ves?
—Si bien como actor le quita lugar a la ficción, hay que reconocer que esas cosas atraen. En las grabaciones, los televisores están puestos en los canales que lo pasan y no lo podés creer. Es como un mundial y está bien que sea así. Es parte del entretenimiento.

—¿Cómo te trata la vida de casado? ¿Esperan un hijo con Mercedes?
—No, si bien es algo maravilloso y queremos tener no uno sino dos, el tema es que no lo estamos buscando. Con Mercedes, todo bien, mucho tiempo conmigo, bancándome.

1 comentario:

lourdes dijo...

nicolas eres guapisimo.
poema:no niegues ke tu madre es pastelera porke un bombom como tu no lo hace cuelkiera
animo guapo sigue asi ke eres el mejor y yo soy tu fan numero 1.sigue haciendo esas novelas ke yo las vere solo porke sales tu .bueno xao guapo,guapo y guapo