sábado, 3 de marzo de 2007

Entrevista a Nico Vázquez: “El sexo es como el rating, hay semanas en las que se mantiene, y otras en las que baja”

¿Quién no recuerda a Pato, el representante estilo coppolesco que hizo reír en Son Amores? Acaso ese papel le haya alcanzado para ganarse un lugar en el podio de los comediantes. Pero luego lo defendió con talento y vocación. Ahora brilla en teatro y televisión, y en sus respuestas muestra que no es sólo una oveja más del rebaño.

1. ¿Al lado de quiénes se siente un sapo de otro pozo?
–Al lado de los que se creen diferentes por su estatus social o porque fueron tapa de revista. Yo me siento a comer en un restaurante de cinco cubiertos y ceno del mismo modo que cuando morfo en un bodegón. En síntesis, me siento un sapo de otro pozo con aquellos que no comen en el bodegón conmigo.

2. En su casa, ¿qué está prohibido?
–La falta de respeto, el mal trato, la invasión y exhibir la camiseta de Boca (risas). De todos modos, confieso que han venido bosteros a ver el clásico conmigo. No soy tan fanático como para no poder compartir un partido con un boquense. De hecho, con mi cuñado, que por desgracia es de Boca, hemos visto juntos algún clásico. Frente a la tele me gusta compartir el partido, pero en la cancha, no.

3. ¿Qué intuye que piensan sus colegas de usted?
–Yo me siento muy querido y reconocido como actor. Obviamente, en este medio predomina la envidia. ¿Qué me envidian? No lo sé, pero si yo envidiase algo de un tipo como yo, envidiaría a su familia o a su mujer pero, a lo mejor, ellos envidian otra cosa. Como no me manejo en esos términos, me duele mucho que me celen. No entiendo cómo puede existir ese sentimiento. Si bien no experimenté algo desagradable por este motivo, sufrí decepciones con compañeros de trabajo por este tema.

4. ¿Qué le hace perder encanto a una mujer?
–Que esté borracha mal, y la excesiva exposición. Para qué mostrar una teta si con un buen escote está todo bien. No me gustan las minas con actitudes masculinas y que muestren en vez de insinuar.

5. ¿Qué valor le da a la frase: “El show debe seguir”?
–Relativo, porque uno debe aprender a parar a tiempo, porque si no, a la larga, el cuerpo y el alma te pasan factura.

6. ¿Cuál es su peor parte?
–La calentona. Cuando me enojo me pongo muy bravo. Llego a agarrarme a piñas. Voy al frente. No me importa nada.

7. Entre sus preocupaciones, ¿qué lugar ocupa el dinero?
–Con la guita soy un desastre. Soy muy gastador. No llevo las cuentas de nada. No ocupa un lugar importante. Cuando no me iba bien estaba tras el dinero porque lo necesitaba para llegar a fin de mes. Hoy ha dejado de ser una preocupación y lo único que me importa de la plata es que me alcance a mí y a mis seres queridos.

8. ¿Qué importancia le da a su imagen?
–Reconozco que soy un poco hincha pelotas en ese terreno, aunque no soy histérico. Le doy la bola justa y necesaria. Lo único que hago para tener una buena imagen es entrenar e ir al gimnasio. Por lo demás, me como todo. No especulo en las comidas, pero a las milanesas en vez de acompañarlas con puré, las como con ensaladas, no más que eso.

9. Si le aseguran que no va a ser castigado, ¿qué delito cometería?
–Iría a un centro de audio y video y me llevaría todo. No quedaría ni la antena de un televisor.

10. ¿En qué lo cambió ser conocido?
–En nada. Sigo siendo el mismo caradura e hijo de puta de siempre. La gente más íntima me sigue diciendo: “Pará Nicolás”. Yo no me privo de nada por ser famoso. Obviamente, no voy a un shopping en un horario pico, pero sigo yendo al cine de los shoppings aunque tenga que sacarme una foto con la gente o firmar autógrafos. Para mí eso es un placer. De hecho, cada vez que salgo de la función de teatro hay doscientas personas esperándome y me saco fotos con todos.

11. ¿Cómo se imagina como mujer?
–Muy loca. Tendría el sí fácil. Sería repu… (carcajadas), pero no con cualquiera, sino con los que me gustasen.

12. ¿Qué se puede aprender de usted?
–A seguir siendo el mismo, más allá de todo lo que me pasó y me pasa. No he perdido mi esencia.

13. ¿Qué piensa cuando se mira al espejo?
–Pienso que crecí en un montón de aspectos, pienso en el esfuerzo de mis viejos y pienso en los sueños que tenía cuando comencé a trabajar como actor, y que por suerte pude concretar. En verdad, no me miro mucho al espejo. Lo uso para arreglarme un poquito y arrancar.

14. ¿Sería capaz de perdonar una infidelidad?
–No. Cuando charlamos del tema con Mercedes le digo: “Conmigo olvidate”. Si bien uno puede perdonar una infidelidad, en el fondo siempre aparece el resentimiento que hace que la historia no se vuelva a escribir de la misma manera.

15. ¿De qué actor mundialmente conocido le hubiese gustado ser amigo?

–De Charles Chaplin. Con él, al menos, me hubiese encantado tomar un café. También me hubiese gustado compartir un trabajo con Jerry Lewis y con Jim Carey. Ellos son mis ídolos. Tener contacto con Carey sería como cumplir un sueño. Por lo que averigüé y me han contado, es reloco. Yo creo que estoy un poco loco como él, pero soy un loco lindo. Soy un loco que sabe lo que hace.

Autoretrato

Nombre y apellido: Nicolás Diego Vázquez.
Apodos: Nico.
Nacionalidad: Argentina.
Edad: 29 años. Nací el 12 de junio de 1977.
Estado Civil: Casado.
Hijos: No tengo, pero estoy con ganas de ser padre.
Hermanos: Soledad (27) y Santiago (17). Mi relación con ellos es excelente. Los amo profundamente.
Signo: Géminis. Como buen geminiano soy soñador e hiperkinético.
Número de la suerte: El 13 y el 5. Siempre que me encuentro con el 13 tengo buena suerte. Con el 5 una vez me gané una moto y, como era menor, mi papá me la hizo vender. Con lo que me pagaron me compré una videocasetera. Era otra Argentina (risas).
Cábalas: Con mi vestuarista, que es la mujer de Marcelo Cosentino, el director de la obra, nos damos un beso, nos ponemos agua bendita en la nuca y nos tocamos el culo antes de la función.
Música: U2, Dire Straigth, Mac Nofler, Roger Waters y Bruce Springteen. Me mata Alejandro Lerner. ¡Si habré chapado gracias a Lerner! “Querido Ale, no sabés cuántas te debo” (risas). También me encantan Los Redondos y Joaquín Sabina.
Libro: El Principito y La novena revelación.
Programa de televisión: CQC y Mujeres asesinas, y ciclos como Vulnerables y Verdad–Consecuencia.
Lugar de vacaciones: Puerto Madryn y San Martín de los Andes.
Color: Celeste.
Perfume: Ultra Marine, de Givenchy.
Comida: Milanesas a la napolitana con puré.
Ropa: Me siento cómodo con remeras, jeans y zapatillas.
Hobby: Jugar al fútbol, entrenar, e ir al gimnasio.
Vicios: No me drogo, no chupo y no fumo, pero me como las uñas.
Profesión: Hasta hace poco ponía comerciante, y cuando me preguntaban: “¿Qué vende?” contestaba: “Vendo alegrías a la gente”. Ahora pongo actor.

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